Red Moon 33

Hola a todos! Último capítulo de nuestra historia (que siento tan mía como vuestra, ya que sus comentarios y buenos deseos son los que me han mantenido escribiendo).

Les cuento que voy a escribir una segunda parte de esta historia, probablemente será un fic cortito enfocado en Davy y sus padres, pero antes me daré unos pocos días de descanso ya que llevo escribiendo sin parar desde marzo!

Espero que les guste el final, y quedo atenta a sus reviews.

Todo mi cariño y que disfruten!

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Capítulo 33

Forgive me

Is all that you can't say

Years gone by and still

Words don't come easily

Like forgive me forgive me

Sorry / Tracy Chapman

Bella POV
-Oh Jazz! Oh dios siiii! –Exclamé en éxtasis mientras mi hombre me entregaba placer, su rostro firmemente enterrado entre mis muslos y su lengua lamiendo mi clítoris incansablemente.
Dos dedos entraron en mi centro y luego de circularlo un par de veces, comenzaron a penetrarme al ritmo de sus lamidas, intercalando rápido y lento, fuerte y suave, para terminar provocándome un orgasmo devastador.

Mientras me recuperaba de la explosión sensorial que me había producido Jazz, él besó mi estómago despacio, lánguidamente, murmurando lo hermosa que yo era, lo sexi que me encontraba, lo mucho que disfrutaba de mi cuerpo…
Yo me incorporé y girando nuestros cuerpos descendí hasta su sexo erecto, que latía de necesidad. Relamiendo mis labios me acerqué mirándolo fijamente a los ojos, oscuros por el deseo, y lo vi tragar nervioso, innecesariamente.
Con la lengua lamí la gota de humedad que se había reunido en la punta y la saboreé.
-Mmmmmmh –Dije haciendo que la vibración de mi voz lo acariciara.
-Ogh! Bellaaaa –Simplemente pudo gemir él.
Con los labios deposité un casto beso en la punta y luego con la lengua recorrí el largo de su erección, para después volver a la punta y tomar lo que más pude en mi boca, ayudándome a abarcar el resto con mi mano y comencé a bombear y succionar, tratando de que entrara cada vez más profundo hasta casi tocar mi garganta.
Su mano se enredó en mi cabello tratando de dirigir mis movimientos y yo se lo permití, después de todo este era su momento.
Más y más rápido, más y más profundo lo recibí hasta que con un gruñido me avisó que acabaría, pensando que tal vez no lo quería recibir en mi boca… Pero eso no podía estar más lejos de la realidad, y comencé a succionar más fuerte y a gemir hasta que fríos chorros de su semilla se deslizaron por mi garganta.
-Aaaaaaaaaah! Mierda! Cariño, te amoooooo! –Exclamó agarrando las sábanas con ambas manos y arqueando su cuerpo en éxtasis, y luego su cabeza cayó sobre la almohada, como si estuviera físicamente exhausto.
Yo lo besé en el cuello y dejé caer mi escudo. Con un hijo empático teníamos que tener mucho cuidado con cómo y cuándo desatábamos toda nuestra lujuria, a menos que lo quisiéramos traumatizado de por vida.
Había descubierto mi escudo poco a poco un par de semanas después de haber dado a luz a Davy, y hasta ahora había sido capaz de bloquearme física y mentalmente a mí misma y a quién estuviera en contacto físico conmigo por determinados períodos de tiempo.

…oOo…

Tres meses habían pasado desde nuestra mudanza a Cook, y había sido como unas largas vacaciones alejados del resto del mundo. Amaba nuestra casa, el entorno, y por sobre todo a nuestra familia.
Durante ese período Davy había crecido hasta parecer un niño de un año físicamente, pero con una inteligencia mental y emocional de un niño mucho mayor. Ya hablaba con frases completas y jugaba de igual a igual con su tío Emmett.
Davy en ese momento corría por el bosque persiguiendo a Emm, quién le había quitado su balón favorito, el de color rojo.
Jazz y yo caminábamos de la mano completamente dichosos luego de nuestra pequeña escapada sexual, y Rose caminaba junto a nosotros vigilando los juegos de Davy y Em.
-Emmett McCarty devuélvele el balón a Davy de una buena vez! –Gritó Rose con las manos en las caderas.
Una enorme carcajada fue la única respuesta, y Emm hizo un par de piruetas con la pelota mientras Davy luchaba por alcanzarla.
Em siguió riendo y Rose gruñó furiosa, pero Davy era más listo, y atacó a Emm con una onda de letargo que lo hizo caer de rodillas. Luego como si nada, se acercó a su tío semi inconsciente y tomó su balón con una pequeña carcajada.
-Yo gané tío Emm! –Gritó Davy.
-Davy! –Exclamé yo levantando mi escudo para que mi hijo no pudiera percibir lo graciosa que yo encontraba la situación –Ya hablamos de esto… no es bueno atacar ni manipular con tus dones con la gente! –Este niño estaba terriblemente malcriado y era un pequeño manipulador, ya que todos babeábamos por él.
-Lo siento mamy… -Dijo enviándome una oleada de amor mesclada con arrepentimiento que casi traspasó mi escudo.
-Davy! –Exclamó Jazz con voz severa –Qué te dijo tu mamá?
-Que no use mis poderes para atacar ni manipular a la gente –Respondió mi pequeño haciendo un atisbo de puchero.
-Nuestros poderes sólo se usan para hacer felices a las personas, entendido? No para solucionar las cosas de manera fácil, Ok?–Preguntó Jazz
-Entendido –Dijo Davy firmemente.
-Me das un beso? –Preguntó Jazz.
-Sip –Respondió Davy estirando sus bracitos hacia su padre mientras Rosalie trataba de despertar a Emmett.
Un momento después sonó el celular de Jazz, quién me pasó a Davy que se aferró a mí cubriendo mi cara de besos.
-Aló –Dijo Jazz al ver en la pantalla un número desconocido.
-Jasper! –Exclamó la chillona voz de Alice. Todos pusimos atención inmediatamente.
-Alice! Que sorpresa…–Exclamó Jazz mientras Davy nos daba miradas curiosas, seguro había percibido el cambio en nuestro humor, de alegre y relajado a algo mucho más sombrío.
-Jasper necesito hablar contigo… En este momento estoy en New York pero puedo verte mañana en Chicago… Crees que sea posible?
-Qué hay de Bella? –Preguntó Jazz.
-Bella? Pero yo pensé… que estaba muerta… que el accidente… nunca más la vi en mis visiones –Dijo Alice sonando insegura.
-Puede asistir Bella o no Alice? –Preguntó Jasper con voz terminante.
-Sí… claro… me gustaría hablar con ustedes dos… -Dijo sonando aún desencajada.
-Bien, mañana en el Starbucks del primer piso del aeropuerto de Chicago al medio día?
-Perfecto… gracias…
-Bien, adiós –Dijo Jazz cortando la comunicación sin darle oportunidad de despedirse.

…oOo…

Después del paseo por el bosque fue hora de la siesta de Davy y después de meterlo a la cama y cantarle una nana, por fin se quedó dormido para dejar a los adultos tener una reunión familiar.
-Qué demonios puede querer contigo ahora esa bruja enana? –Escupió Rose, siempre directa.
-Eso es lo que vamos a averiguar mañana –Dijo Jazz emanando calma.
-No estoy tan segura de querer ir –Dije yo.
-Por qué no? -Preguntaron al unísono Emm y Rose. Jazz se limitó a enviarme su duda.
-Porque por alguna razón Alice no puede verme ni a mí ni a Davy desde el accidente… Y no quiero que se entere de su existencia.
-Pero Edward lo sabe, tal vez él ya se lo ha dicho y sólo fingió sorpresa… -Dijo Rose.
-Pero no estamos seguros… tal vez es mi escudo, tal vez es el hecho de que seamos híbridos…
-Cariño! –Dijo Jazz en tono de amonestación. Él odiaba cuando yo nos llamaba a Davy y a mí de esa manera… aunque fuera verdad.
-Como sea, no podemos arriesgarnos, todos sabemos lo que significa que nos descubran.. –Argumenté.
-Los Volturi –Respondieron todos al unísono.
-Exacto! Yo recién estoy aprendiendo a usar mi escudo, pero no sabemos su alcance… si voy contigo, Davy va a quedar desprotegido… -Terminé.
-Hey! –Rugió Emmett –Yo puedo proteger a Davy de lo que sea!
-Tú sabes a qué me refiero Em… -Dije tratando de calmarlo.
-Tienes razón –Afirmó Rose –Jazz, vas a tener que ir sólo a ver a la pitonisa.
-Está bien –Concedió Jazz –Pero sólo porque no nos queda otra alternativa.
-Sólo vuelve pronto a nosotros –Dije tomando su mano y enviándole todo mi amor.

…oOo…

Jasper POV
Llegué temprano a Chicago, mi vuelo arribó a las 10 de la mañana y me fui a sentar inmediatamente en la cafetería acordada, pensando en qué demonios podría querer Alice. Pedí un café cada media hora para guardar las apariencias y me senté a esperar fingiendo leer el diario.
Cinco minutos pasadas las 12 del mediodía apareció Alice por la puerta, luciendo bien arreglada y vestida con las mejores marcas, como siempre, pero de alguna manera se veía y sentía… cansada… y extremadamente nerviosa.
Yo por simple costumbre e envié una oleada de calma, y ella sonrió tímidamente y se sentó frente a mí.
-Hola Jasper –Me dijo mirando a la mesa, sin levantar los ojos hacia mí.
-Hola Alice –La saludé en un tono cordial. Algo inimaginable meros meses atrás… pero entonces no tenía a Bella…
-Gracias por aceptar reunirte conmigo –Dijo ella.
-Tenía alternativa? –Respondí más secamente de lo que pretendía –Después de todo es gracias a ti que Bella está viva. Eso nunca lo olvidaré, independientemente del daño que me has provocado en el pasado.
-Esa fue mi última visión de Bella… me imagino que la convertiste… -Dijo ella con voz apenas audible.
-Así es –Dije sin querer compartir los detalles.
-Jasper yo… -Comenzó y dudó.
-Dime Alice! Dime qué demonios quieres de mí para poder largarme de una buena vez!
-Quiero… explicarte…
-Explicarme?
-Sí… lo que pasó entre nosotros.
-Yo ya sé lo que pasó entre nosotros, tú tuviste una visión de tu alma gemela y dejaste de amarme, y me convenciste de que mi control era pésimo para tenerme siempre sometido a tu control…
-Eso no es… -Dijo ella pero la interrumpí.
-Es mentira acaso? –Dije susurrando furioso. No podía creer que alguna vez estuve enamorado de esa mujer.
-No…
-Es mentira que me abandonaste cuando más te necesitaba dejándome destrozado?
-No… pero…
-Pero qué, por la mierda Alice? Qué? –Dije comenzando a alterarme al recordar la magnitud de su traición.
-Pero así tenía que ser… si terminábamos de cualquier otra forma tu nunca ibas a encontrar a tu alma gemela!
-Bella? Sabías que Bella era para mí? –Pregunté en shock.
-No desde el principio, al comienzo eran sólo imágenes de ti siendo feliz al lado de otra mujer, pero la mañana de su cumpleaños tuve una visión y todo fue muy claro! Esa noche era el momento de abandonarte… lo siento por el daño que te hice… que les hice a ambos… pero era la única manera de que terminaran juntos –Dijo con los ojos brillantes de lágrimas no derramadas.
-Pero eso no quita que tus sentimientos por mí esa noche eran reales… sentí tu desprecio –Argumenté.
-Bueno, qué esperabas? Después de todo si trataste de comerte a mi mejor amiga! –Se defendió.
-Tú nos tendiste una trampa! La invitaste, envolviste los regalos… no me dejaste alimentarme diciendo que estaría bien… -Dije recordando –Jugaste con todos nosotros por tu propio beneficio y de paso casi nos matas de dolor!
-Era la única manera! –Se defendió ella –Era la única manera de que ambos consiguiéramos lo que necesitábamos.
-Adiós Alice… no quiero volver a verte, gracias al cielo ya no tengo que seguir expuesto a tus juegos de titiritero, creyéndote Dios, manipulando la vida de los demás… -Dije levantándome de la mesa -Sólo una última cosa… por qué ahora? Por qué decirme todo esto ahora?
-Porque te lo mereces… -Dijo. Pero no era toda la verdad.
-Y…? Alice no me puedes mentir más, recuerdas? -La presioné.
-Y porque pensé que Bella había muerto –Admitió y pude sentir un pequeño atisbo del amor que alguna vez tuvo ella por mí.
-Qué hay de Liam? No se supone que era tu alma gemela? –Pregunté sentándome nuevamente para no llamar la atención.
-Sí… lo es… pero… -Tartamudeó.
-Pero no es lo que esperabas? –Terminé. No me extrañaba, después de todo Alice huyó para encontrarlo sin conocerlo.
-No –Admitió –Él es bueno, sólo que… a veces pierde el control…
-Te golpea? –Pregunté furioso.
-Nnnn… si…no… sólo lo ha hecho en un par de ocasiones… ha sido mi culpa… lo he sacado de quicio… son más que nada las peleas, los gritos… -Dijo como si estuviera a punto de romper a llorar.
-Alice no puedes permitir una cosa así! Qué hay de Carlisle y Esme? Ellos saben lo que ocurre?
-No… Liam y yo vivimos en New York y Carlisle, Edward y Esme están con los Denali…
-Lo podría matar! –Exclamé furioso.
-No Jasper! –Dijo casi gritando –Lo amo, él es mi vida… él es mi futuro… sólo tengo que aprender a vivir con él…
-Estás loca Alice, incluso a pesar de lo que nos has hecho te mereces a alguien que te ame…
-Él me ama! –Se defendió –Me ama –Dijo como tratando de convencerse a sí misma.
-Alice, estoy a sólo una llamada de distancia… sólo tienes que pedirlo y voy a estar a tu lado para defenderte –Ofrecí.
-Gracias Jasper… Bella es una chica con suerte…
-Tú tuviste tu oportunidad –Dije fríamente.
-Y la perdí… lo sé… Adiós Jazzy
-Adiós Alice, ya lo sabes… una sola llamada…
-Gracias –Dijo y se levantó y salió del café, mezclándose rápidamente entre la multitud.
Yo me quedé sentado en el café un par de horas más esperando mi vuelo de regreso a casa, perdido en mis pensamientos, triste por el final de Alice, pero contento de retornar a nuestro hogar, con mi familia, mi Bella y mi hijo. Gracias a Alice había obtenido lo que nunca me atreví a soñar… gracias a su traición éramos todos felices de momento.
Y el futuro? Bueno, de eso nos preocuparíamos en el futuro.

%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%FIN%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%

Espero que les haya gustado el final, Alice recibió más que su merecido :-( por su traición y todos nuestros protagonistas son felices… por ahora.

Mil gracias a todos quienes leyeron esta historia, a quienes la recomendaron y a quienes comentaron. Ha sido una gran experiencia y me encantó compartirla con ustedes.

Un abrazo y todo mi cariño!

R.