jueves, 25 de agosto de 2011

Red Moon 3


Hola a todos! Como ven, Jasper ganó la encuesta con un 29% de los votos. El segundo lugar lo obtuvo Alec con un 22%. Gracias a quienes participaron, trataré de escribir una buena historia para ustedes.
Este capítulo pretende establecer las bases de la amistad entre Jasper y Bella, por lo tanto contiene mucho diálogo. Espero que les resulte interesante, ya más adelante tendremos capítulos más movidos.
Abrazos a todos por su buena respuesta, y no olviden comentar. Esta historia será actualizada día por medio, y sus reviews me ayudan a desbloquearme y acelerar el proceso.
Que disfruten!
%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%
Fueron las horas de descanso más pacíficas que puedo recordar, y cuando desperté, cómoda y calentita en la cama… en la cama? Dónde demonios estoy?
Me levanté aterrada mirando a mí alrededor y me di cuenta de que estaba en la habitación de Esme y Carlisle… y no estaba sola.
Capítulo 3
When will we get the time to be just friends
It's never safe for us not even in the evening
'cos I've been drinking
Not in the morning where your shit works
It's always dangerous when everybody's sleeping
And I've been thinking
Can we be alone?
Can we be alone?
When will we get the time to be just friends
When will we get the time to be just friends
Just friends /Amy Winehouse
Bella POV
La silueta de un hombre se recortaba contra el sol del mediodía, cubriendo sus rasgos. No lo pude identificar instantáneamente, pero una ola de calma me embargó y entonces lo supe sin necesidad de ver su rostro.
-Jasper? –Pregunté con voz temblorosa. Mi terror lo desconocido había desaparecido, pero ahora temía estar alucinando… estaría volviéndome loca?

-Hola Bella –Respondió él con voz tranquila, manteniendo su distancia.
-Qué… qué haces aquí? –Pregunté abrumada por lo surrealista de la situación. Aquí estaba conversando tranquilamente con un vampiro que la última vez que lo vi me trató de matar… gracias a mí y a mi torpeza su familia había tenido que largarse de su hogar, y encima había aparecido yo con un bat de beisbol a destruir el piano de su hermano… Dios… qué vergüenza!
-Lo mismo podría preguntarte a ti… -Dijo con una sonrisa. Es extraño, pero nunca antes había visto a Jasper sonreírme, y esta, su primera sonrisa, era triste, y no llegaba a iluminar sus hermosos ojos.
-Cuánto alcanzaste a ver? –Pregunté mortificada. Dios, que haya llegado para encontrarme durmiendo…
-Mmmmmh… creo que todo lo que había que ver… tienes un buen brazo, podrías ser profesional –Me dijo.
-Agh! –Dije cubriéndome la cara con las manos –Y qué demonios haces tú aquí?
-Bella Swan usando palabras profanas? –Se burló.
-Bella Swan hace cosas que antes nunca imaginó posibles –Respondí pensando en las astillas que descansaban donde alguna vez estuvo el glorioso piano de Edward.
-Así veo… -Dijo pensativo desde su rincón junto a la ventana.
-Jasper… me vas a responder? Por qué estás aquí? Estás solo o…? –No lo pude decir… que tal si él había regresado?
-Tranquila Bella, soy sólo yo, nadie más me acompaña. Estoy aquí por… razones personales… -Dijo visiblemente incómodo con el tema.
-Y cuánto tiempo te vas a quedar? Qué hay de Alice? –Seguí disparando preguntas.
-Mi estadía aquí es indefinida. Alice y yo nos divorciamos –Dijo y me dio la espalda.
-Jasper yo… Oh lo siento tanto! –Dije poniéndome de pié y acercándome a él.
-No te acerques Bella –Me dijo girándose hacia mí con un gesto duro y frío –No es seguro para ti estar en mi compañía.
-No seas ridículo… Tú mismo me trajiste a esta habitación, y has estado conmigo desde entonces, estoy segura –Dije recordando lo descansada que me sentía. Seguro que él me había ayudado a dormir.
-Ok, rectifico… no es seguro que estés cerca de mí mientras estoy respirando y en espacios cerrados –Concedió.
-Oh! –Dije desilusionada –Cuando llegaste?
-Hace unos 4 meses…
-Oh… y no me fuiste a saludar? –Dije sintiéndome aún más insignificante. Tan poco significo para esta familia que aún si vivimos en el mismo pueblo no es capaz de ir a mi casa a decir "Hola, regresé"?
-Bella –Explicó con voz profunda. Era menos musical y pulcra que la de Edward, y tenía tonos más roncos, pero eso lo hacía sonar más masculino. Nunca lo había notado antes, encandilada por Edward y su enloquecedora perfección, pero había algo interesante en Jasper… era como si él me fuera más cercano al ser menos perfecto… su imperfección lo hacía más humano… –He querido ir a verte desde que llegué a Forks, pero tú difícilmente te encontrabas e condiciones de enfrentarte a uno de nosotros… sólo hoy… sólo hoy te vi tomar tu vida bajo control y decidir dejar ir al pasado…
-Me siento distinta… más libre… -Concordé.
-Eso puede ser en parte mi culpa –Dijo –Cuando llegué a verte tu dolor… era… invalidante… por eso decidí intervenir… -Explicó incómodo.
-Tú… tú me quitaste mis emociones? Es por eso que me sentía tan apagada, tan indolente? –Dije sin poder creerlo.
-Lo siento Bella… sé que no debí haberme entrometido en tu vida, pero no soporté verte sufrir así.
-Pero eso quiere decir que tú… absorbiste mi dolor? Que lo viviste en carne propia? –Pregunté. Cómo era posible que este hombre que apenas si me conocía asumiera una carga tan grande por mí y de manera silenciosa y anónima?
-Si –Dijo él simplemente.
-Oh Jasper! –Exclamé lanzándome a sus brazos para darle las gracias. Las lágrimas corrían por mis mejillas y necesitaba poder expresarle mi gratitud. Nunca nadie había hecho algo tan desinteresado por mí.
Pero antes de poder llegar a tocarlo, Jasper se movió al otro lado de la habitación, tan rápido como sólo un vampiro se puede mover.
-No te me acerques Isabella –Gruñó –No estoy acostumbrado a tratar con humanos y no quiero finalizar lo que comencé en tu cumpleaños –Dijo visiblemente molesto.
-Lo… lo siento… -Murmuré avergonzada y arrepentida. Y un poco dolida de que rechazara mi contacto físico tal como Edward lo había hecho.
-Tú no tienes nada de qué estar arrepentida Bella… soy yo! Soy yo el que debería haberte pedido que me perdones desde el minuto en que regresé a Forks! Soy yo el culpable de todo tu dolor… -Dijo visiblemente atormentado.
-Jasper fue mi propia estupidez la que causó todos los problemas! Si no hubiera sido tan torpe… si Edward no me hubiera lanzado contra la mesa de vidrio… -Balbuceé.
-Lo siento –Dijimos los dos al mismo tiempo. Nuestra sincronía me hizo sonreír y él arrugó el ceño.
-Jasper… no te sentirías más cómodo si estuviéramos al aire libre? –Pregunté.
-Posiblemente… -Dijo tratando nuevamente de sonreír, pero sin lograrlo del todo.
-Vamos al jardín… a lo mejor me puedes ayudar a sacar las malas hierbas que están plagando las flores de Esme… -Le dije pesando que una conversación incómoda es más fácil teniendo algo que hacer con las manos.
-Vamos… voy a buscar las herramientas y te encuentro allá –Dijo aparentemente aliviado.
Yo bajé a velocidad humana al primer piso y fui sacando las sábanas de los muebles a medida que pasaba junto a ellos. No era bueno que Jasper viviera en una casa con aspecto de mansión embrujada. Cuando llegué a la puerta de entrada, Jasper ya se encontraba en el jardín, con un set de jardinería y un rastrillo. Me entregó el rastrillo a mí y me dijo
-Toma, con este tienes menos posibilidades de cortarte y sangrar…
-Humph! –Resoplé pero secretamente le encontré la razón. Me dirigí a una de las esquinas del jardín y comencé a rastrillar las hojas mientras Jasper se arrodillaba en el pasto y comenzaba a sacar las malezas. Trabajamos en silencio durante largo rato hasta que no aguanté más y le pregunté –Jasper… por qué terminaron Alice y tú?
-Ella ya no me amaba –Respondió Jasper simplemente encogiéndose de hombros. Pero no me engañó, pude ver el dolor en sus ojos.
-Eso no es todo… -Afirmé –Si no me lo quieres decir está bien… pero no me mientas.
-Ella… me dijo que estaba cansada de hacer de mi niñera… que no podía estar con alguien con mi falta de control -Respondió dándome la espalda. Yo no paré de rastrillar pero ambos nos quedamos en silencio después de eso. Cómo podía mi amiga haberle dicho una cosa así a Jasper? Cómo era posible que la mujer dulce y enamorada que yo había conocido fuera tan cruel con un hombre con el que había vivido por más de 80 años?
-Jasper… tú viniste a Forks por mí verdad? –Pregunté.
-Para conseguir tu perdón, sí –Aclaró.
-Y ahora que sabes que no hay nada que perdonar… que vas a hacer?
-No lo sé… -Respondió.
-Me gustaría que te quedaras… -Dije demasiado esperanzada para mi propio bien.
-Por qué? –Preguntó sorprendido.
-Porque creo que tu y yo necesitamos a un amigo, alguien en quien confiar… y creo que podemos ser eso el uno para el otro… -Dije simplemente. Con quién más podría recordar los momentos felices que tuve con mis vampiros?
-Serías mi amiga a pesar de que traté de matarte? –Preguntó sorprendido.
-Sip… serías mi amigo a pesar de que arruiné tu matrimonio? –Pregunté.
-Si –Respondió regalándome una sonrisa de verdad. Era deslumbrante y quitó parte del peso de mi corazón… estaría proyectando?
-Ahora… tengo hambre… -Dije –Me acompañarías a almorzar? O es muy difícil para ti?
-Te acompaño pero nos sentamos al aire libre -Me dijo.
-Trató! –Exclamé estirando mi mano hacia él pero sin moverme de mi lugar. Él estiró su mano y desde 10 metros de distancia, fingimos un apretón de manos.
…oOo…
Llegué a la cafetería en mi camioneta y Jasper ya me esperaba ahí, sentado en una de las 2 mesas ubicadas al aire libre. Raramente eran usadas, lo que además nos daba la ventaja de una relativa privacidad. Nadie escucharía nuestra conversación.
-Ok, tenemos que inventarte una coartada –Dije.
-Coartada? –Dijo levantando una ceja.
-Sip… algo tenemos que decir para explicar por qué no estás en California con tu familia o en la Universidad…
-No quiero mentir más… -Me dijo –Qué tal si simplemente digo que necesitaba un tiempo a solas después de mi ruptura con Alice? Eso lo explica todo razonablemente.
-Tienes razón –Dije sorprendida. Estaba acostumbrada a las complicadas redes de mentiras que inventaban Edward y Alice y me sorprendió darme cuenta de que decir la vedad podía resultar tan sencillo y liberador –A mí tampoco me gusta mentir…
-Algo tenemos en común… -Dijo él.
-Es raro como nunca conversamos antes… sólo una vez, cuando escapamos a Phenix… -Recordé.
-Eso… no es porque yo no quisiera, Bella. Alice y Edward me prohibieron acercarme a ti, para que no corrieras riesgos… y bueno, ya vimos que tenían razón… -Dijo mirándome a los ojos.
-Y aún así estás dispuesto a ser mi amigo? –Pregunté. Edward jamás me habría permitido ser amiga de Jasper…
-Tú ya eres una adulta Bella, tú sabes los riesgos que estás corriendo al estar cerca de mí… Yo voy a hacer todo lo posible para mantenerte a salo, pero entiende una cosa –Dijo seriamente –Yo no soy tu padre, no te voy a dar órdenes. Tú tienes el poder, entiendes? Tú misma lo dijiste, ambos necesitamos a un amigo…
-Ok… –Dije profundamente agradecida. Se sentía fantástico no ser constantemente subestimada.
En ese momento apareció la mesera, dando una mirada de curiosidad y lujuria a Jasper.
-Una hamburguesa completa con papas y una coca light –Dije.
-Sólo agua para mí –Dijo Jasper sin mirarla a ella ni al menú que le ofrecía. La chica lo miró decepcionada y se largó a buscar nuestra orden.
…oOo…
Pasamos esa tarde caminando por el bosque, conversando y conociéndonos. Eran muchísimas cosas las que yo no sabía de Jasper. Me contó sobre su incorporación a la vida vampírica, me contó sobre sus años en el ejército de María y yo le conté de mi vida con Renee, de mi alergia a las nueces y de mis proyectos para el futuro.
Ninguno de los dos volvió a mencionar a Edward o Alice, sabiendo que eran temas demasiado dolorosos para tratar en nuestra incipiente amistad.
-Es mucho más fácil cuidarte desde cerca –Comentó.
-Me estás manipulando ahora? –Pregunté. No me sentía mal ni triste.
-No Bella… no lo voy a volver a hacer sin tu consentimiento, pero si te estoy monitoreando y es increíble la diferencia entre lo que sentías ayer y lo que sientes ahora –Dijo pensativo.
-Me siento diferente –Respondí –Ahora que dejé ir a Edward… y ahora que sé que no todos me abandonaron… me siento liberada!
-Emmett no quería dejarte, lloró muchísimo por ti… -Dijo Jasper -Los demás tampoco querían irse, pero en la familia todos dan demasiada importancia a las opiniones de Edward.
-Por qué es eso? –Pregunté.
-Me imagino que porque gracias a su don parece saberlo todo… No lo sé realmente Bella… yo nunca pertenecí completamente a la familia Cullen… -Dijo metiéndose las manos en los bolsillos y pateando una piedra. Un gesto tan humana que trajo una sonrisa a mi rostro.
-Lo siento… -Dije súbitamente compungida.
-Por qué? –Preguntó él mirándome fijamente.
-Por que por mi culpa perdiste a tu familia… -Dije.
-Bella te acabo de decir que ellos nunca fueron mi verdadera familia… siempre fui un extraño entre ellos, excepto con Rose y Emmett… Ellos fueron distintos… -Suspiró -Además fui yo quien te atacó. No lo olvides Isabella… esta amistad entre tú y yo puede tener un final fatal…
-Y tú no te olvides de esto Jasper, yo no te tengo miedo…
%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%
Y? Les gusta la presentación de los personajes? Háganme saber sus opiniones!
Reviews=Love

1 comentario:

  1. Ay pobre Amy...En fin
    Me encantó el capítulo y estoy deseando ver cómo se desarrolla esa amistad! Sí!!!
    Un besazo
    T.

    ResponderBorrar

No olvides comentar!!!

Calendario