Hola chicos! Nuevo capítulo de Beautiful Crazy para ustedes, esta vez desde el hospital. Riley y Charlie se conocen… qué ocurrirá?
No olviden comentar, un abrazo de oso.
R.
%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%
-Buenas noches -Le dije asumiendo que sería su padre -Mi nombre es Riley Biers y soy el psiquiatra de Bella.
-Charlie Swan -Respondió el hombre con la voz ronca limpiándose las lágrimas -padre de Isabella.
Capítulo 11
…Y soy buena chica
o por lo menos lo parece
porque nadie me mira
cuando muerdo las paredes.
Tengo una pistola
por si un día todo falla
en vez de hacer la cola
poder saltar la valla...
Tengo una pistola / Christina y los Subterráneos
Riley POV
-Lamento mucho conocerlo en estas circunstancias -Le dije al padre de Bella extendiéndole mi mano.
-Lo mismo digo... -Dijo él estrechándola con fuerza -Qué... qué le pasó...? el sábado estaba bien, compartimos sin problemas, y ahora esto... pudo haber muerto... -Preguntó mientras las lágrimas corrían por su rostro.
-Isabella sufre de trastorno bipolar, por lo que es muy fácil que pase de la alegría y la euforia a la depresión más profunda... lamentablemente aún no comienzan a hacerle efecto los estabilizadores del ánimo que le receté, ya que todos sus medicamentos funcionan de manera acumulativa –Dije en mi tono más profesional.
-Y qué va a pasar ahora? -Preguntó acercándose a la cama y acariciando el cabello de Bella casi con reverencia.
-Primero que nada Bella va a tener una cuidadora las 24 horas, ya que no podemos permitir que se repita un incidente como este... y en segundo lugar tenemos que reforzar la psicoterapia, tal vez diariamente por una o dos semanas... -Le dije en mi mejor tono profesional, mientras la culpa me consumía. Cómo decirle a este hombre que tenía al frente que parte del problema de Bella era muy posiblemente su relación conmigo?
-Por qué... lo hizo? -Preguntó él mirándome como si yo fuera el portador de todas las respuestas.
-No lo sé con exactitud, ya que justamente lo hizo antes de su cita de psicoterapia conmigo, pero creo que Isabella tiene serios problemas con su autoestima... de hecho es tan frágil que un mal comentario o un pequeño enfrentamiento con alguna de sus compañeras la hacen dudar de su valor como persona. Su timidez natural se ve potenciada con esta situación y aquí tenemos el resultado... autoflagelación. Isabella sabía que no moriría, pero se quiso castigar por alguna razón.
-Autoflagelación? Castigar? -Susurró Charlie impactado.
-En pocas palabras si, ella cree que merece ser castigada por algo, y siente alivio cuando recibe ese castigo, aunque sea de parte de sí misma -Le expliqué en términos sencillos.
-Por dios, hija! -Dijo cubriéndose el rostro con las manos y sollozando en silencio. Sus hombros mostraban sus espasmos y yo me quise retirar, me sentía totalmente incómodo donde me encontraba, pero sabía que no era posible. Odiaba esta parte de ser médico.
-Bella será dada de alta mañana, y despertará en un par de horas. Si quiere lo puedo acompañar a la cafetería por un sándwich u otra cosa para comer mientras tanto -Ofrecí cuando Charlie se hubo calmado.
Él me miró con los ojos vidriosos y la mirada perdida pero asintió y me siguió por los pasillos del hospital. Finalmente llegamos a la clínica y yo compré 2 cafés y dos sándwiches de jamón con queso, ya que tenía la impresión de que Charlie no comería nada si no lo hacía yo también
Nos sentamos en silencio y comimos nuestros sándwiches y bebimos nuestro café, hasta que Charlie finalmente habló.
-A usted le importa Bella -Me dijo, dejándome de una sola pieza.
-Por supuesto -Atiné a contestar -Soy su psiquiatra.
-No hablo de eso -Me dijo -Un médico normal no se queda al lado de su paciente como usted lo está haciendo con Bella y conmigo... usted tiene algo con mi hija doctor Biers?
-Señor Swan! -Exclamé sorprendido y arrinconado. Este hombre podía destruir mi carrera en un momento... pero no me atreví a mentirle. Por que tenía los mismos ojos de mi Bella, que parecían mirar hasta lo más recóndito de mi alma.
-Y bien? -Dijo él sin dejar de mirarme, pero con voz firme y seca.
-La amo, señor -Dije derrotado mirando a la mesa, sin poder ya sostener su mirada.
-Y ella? -Me preguntó sin parecer sorprendido.
-Ella parece compartir el sentimiento... pero con Bella es difícil estar seguro... ella es tan hermética a veces...
-Sí, eso lo sacó de mí -Dijo con expresión soñadora y triste.
-No está enojado? -Pregunté.
-No me malentiendas muchacho -Me dijo -No me gusta pensar en mi hijita con nadie, yo aún la veo como a una niña... pero durante este último año Bella perdió interés en todo, dejó de cocinar, de cantar, de bailar y de reír. Dejó de importarle cómo se veía y por períodos dejó incluso de comer a menos que yo la obligara... Todo por ese maldito Edwin... Mi niña trató de suicidarse por amor, por lo tanto no creo que esté preparada para manejar otra relación -Me dijo mirándome fijamente - Pero ante hechos consumados no tengo nada que hacer... si ella te ama y tú la amas a ella no me voy a oponer a menos que le hagas daño. Estás advertido muchacho... tengo un arma y conozco el bosque como la palma de mi mano, sé exactamente dónde ocultaría tu cuerpo -Me amenazó.
-Nunca le haría daño en forma consiente señor -Dije pero a mi mente vino Victoria y sus mordaces comentarios... Había permitido que dañaran a Bella, era mi culpa que ella estuviera en ese estado... Mierda!
-Bien... -Dijo él -Ahora voy a regresar a ver a mi hija -Dijo -Eres bienvenido a esperar conmigo a que despierte, pero cuando ella despierte la quiero para mí.
-Si señor -Respondí. Me quedaría en el hospital aunque tuviera que cancelar todas las citas de la semana.
Regresamos a la habitación de Bella donde seguía dormida, y Charlie prendió el televisor y encontró un canal donde transmitían deportes. Yo ignoré el aparato y me concentré en Bella, que se veía tan pequeña y frágil entre las sábanas, con sus brazos amarrados con fuertes muñequeras de cuero, su brazo derecho conectado a una unidad de suero y su cuerpo conectado a un monitor cardiaco siguiendo sus pulsaciones.
Y así pasaron las horas...
Charlie y yo no hablamos, pero quedamos atentos a cualquier movimiento, a cualquier señal de que ella regresaba a la consciencia...hasta que se produjo su despertar...
Bella movió lentamente sus dedos, y un gemido de dolor salió de sus labios.
-Bella -Dijo Charlie acariciando su frente -Me escuchas?
-Mmmmmmmh... -Gimió como un gatito sin abrir los ojos. Seguro estaba sintiendo la incomodidad de despertar de la anestesia general...
-Bella despierta cariño... despierta, estoy aquí con Riley... -Dijo Charlie.
-Mmmmh... Charlie?... Riley?... -Dijo y suspiró.
-Si Bella, soy yo -Le dije tratando de sonar alegre, o al menos animoso.
-Papaaá -Dijo y comenzó a llorar aún sin abrir los ojos.
-Shhhh... tranquila princesa, tranquila que todo va a estar bien...
-Lo... siento... -Sollozó ella y trató de moverse, pero las amarras en sus brazos se lo impidieron. Sólo entonces trató de abrir los ojos. Se demoró un par de minutos en enfocar la vista, tiempo que pasó llorando suavemente.
-Tranquila princesa, no te puedes mover... shhhhhh... -Trató de apaciguarla su padre, pero ella mientras más ganaba consciencia más se alteraba, al punto en que debí intervenir.
-Bella -Le dije -Estás restringida por tu propia seguridad... no te reveles por que no va a funcionar... tranquila... -Dije, pero mi voz no la tranquilizó sino que la hizo llorar con más fuerza.
-Papá... lo siento... lo siento -Repetía, cada vez más alterada hasta que pensé que deberíamos sedarla nuevamente por su propia seguridad.
-Bella, mi princesa, no estoy enojado contigo... estoy enojado conmigo, por no saber protegerte, por no saber cómo cuidarte -Le dijo Charlie mientras le acariciaba la frente y el cabello. Eso pareció ir tranquilizándola de a poco.
-Señor Swan -Le dije -Necesito hablar con Bella a solas, sólo será un momento -Le pedí. Él me miró con desconfianza y luego miró a su hija.
-5 minutos es todo lo que te daré por ahora -Me dijo. Yo no quise discutirle diciéndole que como su médico tratante tenía derecho a estar con ella lo que estimara conveniente. Necesitaba respetar al padre de mi novia.
-Bella... -Dije cuando Charlie salió renuentemente por la puerta.
-Riley no... -Lloriqueó ella, inmóvil por las amarras de sus manos.
-Bella escúchame! -Exclamé -No hay nada entre Victoria y yo! Nada! Ella es mi vecina y nada más, el día sábado fui a una "reunión" en su casa en la que se suponía que habría más gente pero resultó que éramos sólo ella y yo... Te juro por lo más sagrado que no pasó nada entre nosotros. Nada! Estuve todo el tiempo pensando en ti y en el maravilloso día que tendríamos al día siguiente! Y así fue... el domingo fue especial, verdad? Lo fue... -Le dije tomando su mano mientras ella lloraba en silencio -Bella dime que me perdonas por mi estupidez... debí habértelo dicho todo de inmediato, pero no quise arruinar nuestro momento involucrándola a ella... Dime que me perdonas Bella... -Rogué.
-Riley... yo... te quiero... -Sollozó -Pero me dolió tanto... me sentí tan engañada...me sentí como una estúpida por creerte, por creer que me podías querer.
-Bella casi me matas del susto con lo que hiciste hoy... yo sé que no trataste de suicidarte, sé que fue un llamado de atención y una manera de lidiar con el dolor... pero no puedes comportarte así nena, no es sano... -Le dije limpiando las lágrimas de sus mejillas con mis dedos y a punto de comenzar a llorar como un niño..
-Lo sé... lo sé... no sé por qué lo hice, algo en mí se reveló y necesité el dolor físico... -Me dijo.
-...Para no lidiar con el dolor emocional... Nena, siento tanto que hayas sufrido por mi culpa, pero debes saber que yo nunca te haría algo que te hiciera daño a propósito.
-Pero me lo haces de todos modos... me siento tan insegura de ti!
-Bella yo te amo, no hay nadie más para mí -Le dije y limpié su rostro con pañuelos que saqué de su velador -Deja de llorar mi amor, yo soy tuyo... no me vuelvas a asustar de esta manera... juntos vamos a buscar otras maneras para que expreses tu desazón, tu negatividad y tus complejos... pero cortarte no es una de ellas -Le dije y besé su frente -Tu papá está aterrado, si no lo haces por mí hazlo por él...
-Mi pobre papá -Dijo ella y más lágrimas fluyeron de sus ojos -Riley... de verdad me amas? -Preguntó
-De verdad te amo, más de lo que pensé que se podría amar en tan poco tiempo.
-Yo también te amo... no me engañes... no me rompas... -Me rogó.
-Bella nunca te he engañado ni lo voy a hacer... -Le dije -Tengo tantos planes para nosotros -Dije sentándome a su lado y tomando su mano. Ella me la apretó fuerte a pesar de que sé que le debe haber dolido.
-Planes? -Preguntó ella.
-Sí, para cuando estés mejor... vamos a vivir juntos en Seattle y tú vas a estudiar cocina internacional y vas a ser una gran chef, y yo voy a enseñar en alguna Universidad y vamos a ser tan felices!... Vamos a vivir en un nuevo apartamento, vamos a comenzar de cero, un lugar sin Victoria ni malos recuerdos –Dije dispuesto a vender mi apartamento y mudarme por ella.
-Aún quieres hacer planes conmigo a pesar de lo que hice? -Me preguntó.
-Bella nena, te amo... que parte no te queda clara? -Dije acercándome a su rostro y besando sus párpados, su frente, sus mejillas y por último, suavemente, su boca. Sus labios estaban hinchados por tanto llorar, y nuestro beso comenzó suave, apenas un roce, pero entonces ella gimió y yo no pude controlarme... ataqué su boca con lengua y dientes hasta que ambos terminamos jadeando.
-Te amo -Dijo ella -Me perdonas?
-Sólo si me perdonas tú a mí -Le dije.
-OK -Respondió con una sonrisa tímida, una sonrisa de niña.
-OK -Dije yo y besé su frente una vez más.
-Riley... no me van a soltar las manos? –Preguntó dulcemente, como si así me pudiera convencer..
-No nena, lo siento, pero eres un paciente de alto riesgo... sólo te van a soltar para ir al baño, y eso es yendo acompañada.
-Aaaagh! nooooo! -Se quejó -Prometo que me voy a portar bien...!
-Eso no es suficiente, lo siento... necesitamos pruebas de que te estás comportando como corresponde. Mañana te vas de alta y vas a tener cuidadora hasta que nos convenzamos de que estás mejor.
-Pero... -Trató de argumentar.
-Pero nada, esto es lo mejor para ti amor... -La interrumpí.
-Demonios! –Dijo enojada.
-Ya es tiempo –Dijo Charlie entrando a la habitación –Es hora de que pueda hablar con mi hija.
-Está bien señor Swan, pero por favor no la altere o tendremos que sedarla nuevamente –Le advertí –Yo voy a estar en el pasillo mientras ustedes conversan.
-Gracias Biers –Dijo Charlie.
-Te amo –Dijo Bella tímidamente –No te vayas lejos…
-Nunca –Le dije besando su mejilla y retirándome del lugar. No quería nunca volver a separarme de ella…
%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%%
Reviews=love=actualización
No hay comentarios.:
Publicar un comentario
No olvides comentar!!!