lunes, 23 de julio de 2012

El Crepúsculo de Emmett 24



Hola a todos! Wow! El capítulo pasado si que fue controversial! La mitad de los comentarios que recibí fueron de gente que odió el capítulo (e incluso a mí) y hasta me dijeron que estaba "traicionando a mis lectores". Auch! Eso me dolió. Yo creo que traicionar a mis lectores sería abandonar la historia, no escribirla como siempre estuvo planeada en mi cabeza…

Afortunadamente la otra mitad de ustedes me apoyó y comprendió que toda historia necesita su cuota de drama… De lo contrario la historia habría terminado cuando Bella y Emmett se hicieron novios!

Gracias a Gisele Maza por su sugerencia de la canción de este capítulo. Es perfecta!

En fin, espero que este capítulo sea más del agrado de todos, y no duden en expresar su opinión. Me alaguen o me crucifiquen siempre es útil.

Cariños y que disfruten!

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James me quitó la toalla rasgándola y quedé desnuda frente a él.
-Me calientas Isabella –Dijo James mientras acariciaba mi cuello con el dorso de su mano –Y por fin vas a ser mía –Y diciendo esto me besó.


Capítulo 24

As my life flashes before my eyes
I'm wondering will I ever see another sunrise?
So many won't get the chance to say goodbye
But it's too late too pick up the value of my life
Russian Roulette / Rihanna

Bella POV
La manos de James comenzaron a explorar mi cuerpo desnudo y el terror en mí se hizo evidente… no podía dejar de temblar mientras el desgraciado me recorría acariciando mis senos y besando mi cuello.
-James… -Rogué –Por favor… no! -Sollocé.
-Cuidado gatita… he sido paciente contigo –Dijo amenazante –Podemos hacer esto por las buenas y gozar los dos… o hacerlo por las malas, y créeme, voy a disfrutarlo de ambas maneras –Y con esto su boca se prendió de uno de mis pechos, succionando violentamente. Yo grité de dolor y su mano se metió en mi entrepierna… me sentí sucia, violada en lo más íntimo de mi ser… qué más me quitaría este hombre?
Sentí mi piel vibrar y mis emociones se desbordaron… y en ese momento algo sucedió.
Una luz azul explotó entre nosotros y James salió disparado hacia atrás, rompiendo la pared y la mitad de la casa. Yo me quedé mirándolo atónita sin saber qué había ocurrido… Había sido yo quien había producido esa explosión? Mi cuerpo se sentía aliviado, como si hubiera descargado una gran presión, La mitad de la casa parecía haberse derrumbado, era como si alguien hubiera lanzado una bomba entre nosotros. Todo estaba destruido.
James yacía medio inconsciente y yo me dirigí hacia él… Esta era mi oportunidad de deshacerme de él. Pero cómo? Recordé vagamente decir a Emmett que la única manera de destruir a un vampiro era otro vampiro… y algo sobre el fuego… Pero qué herramienta usar para matarlo? Tendría suficiente fuerza para hacerlo? Yo era, después de todo, sólo una vampira neófita, no tenía la experiencia ni el poder de James...
Pero no tenía tiempo que perder. Me acerqué a James y cerrando los ojos de puro asco mordí su cuello hasta sacarle un pedazo. Lo logré y chorreando su veneno por la barbilla, lo escupí. Él gritó en agonía pero estaba demasiado atontado aún y sus movimientos fueron mucho más lentos que los míos. Con mis manos lo inmovilicé y con mis dientes saqué otro pedazo… y otro… hasta que desprendí su cabeza de su cuerpo.
Sin saber qué hacer con la cabeza chorreando veneno, salí de la casa y la dejé en el suelo mientras buscaba fósforos o un encendedor en lo que quedaba del interior de la casa. Temblaba de nervios y miedo de que de alguna forma James lograra recuperarse, por lo que una vez que me apuré lo más posible en mi búsqueda.
Finalmente encontré fósforos en la cocina y corrí con ellos al patio, mientras al interior de la casa podía sentir el cuerpo de James retorcerse. Cuidadosamente para no quemarme, prendí un fósforo y se lo lancé a la cabeza que descansaba en un charco de ponzoña.
Inmediatamente la cabeza se incendió, y pude ver la expresión de completa incredulidad de James al quemarse, emanando una nube de humo púrpura. Luego de asegurarme de que la cabeza estaba reducida a cenizas me dirigí al cuerpo, que se contorsionaba violentamente. Usando toda mi fuerza me fue sencillo desmembrarlo y repetí el procedimiento y me quedé impávida viendo cómo mi asesino se destruía.
Una vez que todo hubo acabado, tomé las bolsas de ropa y salí de la casa. El cuerpo de James fue combustible suficiente para que la casa comenzara a quemarse por completo… mientras yo sollozaba sin lágrimas de alivio por haberme salvado de la violación y la vida de esclavitud.
Cuando todo hubo ardido, di un suspiro y evalué mis opciones. Lo primero que debía hacer era vestirme.
Con todo cuidado intenté ponerme otro juego de ropa interior, lenta, delicadamente, y esta vez sí me resultó ponerme las bragas. Pero destruí dos sostenes, por lo que decidí prescindir de ellos.
Luego fue el turno de los suaves pantalones de yoga. Con toda paciencia me los calcé y sonreí satisfecha. Sólo me faltaba la camiseta y las zapatillas…
No sé cuánto tiempo me demoré en vestirme, pero pude apreciar cómo cambiaba de posición el sol en el cielo… Hasta que finalmente estuve lista!
Pero qué hacer? No sabía dónde estaba y no quería asesinar más humanos… podría tratar de alimentarme de animales del bosque… Sí, eso era lo primero, aunque estaba satisfecha por el momento, sabía que el ardor regresaría y me volvería loca.
Corrí internándome en el bosque sin dar una mirada atrás hacia la cabaña quemada con el cuerpo del maldito de James. Quería olvidarlo, quería empezar de nuevo… quería a mi Osito… pero cómo volver a él? Considerando el monstruo en el que me había convertido, cómo podría amarme aún? Oh pero si las cosas fueran al revés lo perdonarías? Me pregunté.
Sí, le perdonaría casi todo, porque lo amo.
Sería su amor por mí tan fuerte como para olvidar y perdonar?
Oh por favor! Rogaría si fuera necesario…nada importaba mi dignidad… sólo necesitaba recuperar a mi alma gemela.
Mientras divagaba me interné cada vez más en el bosque en la búsqueda de alimento. De pronto pude escuchar a la distancia el sonido de dos corazones. Bombeaban pesadamente, y comencé a reunir veneno en mi boca.
Silenciosamente me dirigí a acechar a mis víctimas… dos alces que bebían de un arroyo. Ágilmente me lancé sobre el primero y hundí mis dientes en su cuello, traspasando piel, grasa y músculo hasta obtener lo que necesitaba… un flujo constante de sangre.
La sangre era asquerosa, amarga, grasienta y apestosa. No tenía comparación con la dulce sangre humana que había probado con James… Pero a qué costo? Si yo pretendía que Emmett algún día me perdonara lo que había sucedido tenía que empezar ahora a incorporarme al vegetarianismo.
Bebí sin ganas hasta que el animal murió y dejé escapar al segundo. Luego aproveché el arroyo para lavarme quitándome los restos de pelo y sangre del cuerpo y el rostro y seguí mi búsqueda por la civilización. Necesitaba un teléfono para llamar a Emm para que me vinieran a buscar, donde fuera que me encontrara.
Llegó la noche y no me importó… tenía perfecta visión nocturna.
Decidí correr en línea recta hasta salir del bosque… y rezar para no encontrarme con muchos humanos, porque mi control era prácticamente inexistente.
Corrí a través del bosque sintiéndome libre por primera vez. Ágil, grácil, mi balance era perfecto.
Corrí por tres horas a toda velocidad, hasta que los árboles comenzaron a espaciarse y nuevos olores atacaron mis sentidos… corrí un par de minutos más a velocidad humana y me encontré con una carretera desierta. Perfecto! Ahora sólo tenía que decidir a qué dirección ir hasta que me encontrara un cartel diciendo dónde demonios estaba.
Elegí caminar hacia mi izquierda, y luego de un par de pasos comencé a correr. No es que nadie me fuera a ver! De pronto me encontré con un letrero que decía "Bienvenidos a Agua Fría National Monument"… Ok, eso significaba que estaba saliendo del bosque y yo sabía que ese bosque quedaba cerca de Phoenix, al norte… pero hacia dónde me estaba dirigiendo yo? Sin el sol para guiarme simplemente seguí la carretera. Corrí un par de kilómetros más y encontré otro letrero que decía "Black Canyon City 25 millas".
Perfecto! Yo conocía Black Canyon, era un pequeño pueblo aledaño a Phoenix, con Renee íbamos a veces a visitar a una amiga suya que realzaba cursos de meditación.
Seguí corriendo, ya con una destinación en mente y sólo me detuve al encontrarme con las primeras casas del pueblo... El aroma de los humanos era embriagador… cómo conseguir un teléfono sin matar a todos los habitantes de la casa? O por qué no decirlo, masacrar al pueblo entero?
Traté de respirar por la boca, manteniéndome a distancia. Esperaría al amanecer, seguramente alguna casa quedaría vacía y yo podría ocupar el teléfono.
La ansiedad me estaba matando, mi mente, enormemente ampliada en sus capacidades, preveía miles de escenarios distintos… Y si los Cullen no me quieren? Tendría que pasar la eternidad en soledad? Dios! Si era así mejor me lanzaba al fuego de una buena vez! Pero no, hay que tener fe, seguro que si Emm me amaba como yo lo amo me daría al menos la oportunidad de explicarme.
Lentamente salió el sol, y pude escuchar cómo comenzaba la actividad en los diferentes hogares. Vi salir a las personas y cuando el sol ya casi marcaba el medio día me atreví a moverme. Sin respirar y tratando de mantenerme a la sombra, comencé a recorrer las distintas casas… la mayoría tenían uno o más corazones latiendo en su interior… dueñas de casa con sus niños. El veneno comenzó a fluir y debí tragar con mayor frecuencia. Pero seguí sin respirar.
Finalmente, ya internándome en el pueblo, encontré una casa vacía. La rodeé y forcé la puerta trasera con asombrosa facilidad e ingresé por la cocina. Y ahí, colgando de la pared, había un teléfono.
Lo tomé de inmediato pero al tratar de marcar el número de Emm apreté muy fuerte las teclas y destruí el aparato traspasándolo con los dedos.
Quise llorar, y en un arranque de furia rompí una pared con mis puños.
Decidí buscar otro teléfono, seguramente había un inalámbrico en alguna parte de la casa.
Me tomé un momento para tranquilizarme, y comencé a explorar la casa. Pertenecía probablemente a un hombre soltero, y estaba bastante desordenada. Recorrí el living y el comedor sin resultados. Demonios! Donde estaba el maldito teléfono?
Subí las escaleras y encontré la habitación principal… y ahí, sobre la cama, un pequeño teléfono inalámbrico! Quise gritar de emoción, pero no quería respirar hasta que fuera estrictamente necesario, ya que el ardor en mi garganta se hacía insufrible en la cercanía con los humanos.
Con todo el cuidado del que fui capaz tomé el aparato y suavemente marqué el número del celular de Emmett.
Y no me respondió.
Llamé una y otra vez, cada vez cuidando no destrozar el aparato, pero no me respondió.
Alice! Llamaría a Alice!... Pero no recordaba su teléfono… maldita sea! Lo tenía grabado en mi celular, por lo que nunca debí aprendérmelo. Traté de recordar… mi mente humana en algún momento había visto ese número. Demonios! Y no es como si pudiera llamar al hospital de Forks para hablar con Carlisle… no tenía ese número tampoco.
Recuerda Bella… concéntrate…

…oOo…

Emmett POV
Todo me importaba una mierda.
Cerré las cortinas de mi dormitorio y me metí a la cama que olía a ella… era lo único que me quedaba del pequeño espacio de tiempo en el que fui feliz.
Pasados unos días Alice comenzó a traerme sangre en termos, ya que me negué a salir a cazar y dejar mi santuario. Al principio no la bebí, pero la sed fue más fuerte, y al cuarto día acepté la sangre que me ofrecía mi hermanita.
Eso sólo me dio energías para sufrir con más fuerza.
Todos en la casa me dejaron en paz, y hablaban en susurros para no molestarme. A mí me daba lo mismo todo. Me aferré a la ropa que Bella dejó en el hotel y eso me daba un poco de paz… hasta que recordaba que ella había muerto por mi culpa!
Quería destruir cosas, descargarme, gritar, pero estaba tan deprimido que la mayoría de los días no me levanté de la cama.
El Jefe Swan me fue a interrogar poco después de que llegamos de Phoenix, y se veía tan destrozado como yo. El interrogatorio fue corto, ya que yo no tenía nada que decir, y el Jefe pudo ver que yo también estaba sufriendo por su hija. Después de eso, me dejó tranquilo.
Y ahí me encontraba, tapado con la colcha y olisqueando una camiseta de Bella cuando mi celular comenzó a sonar.
No me importó. Quien quiera que fuera se podía ir a la mierda!
Después de 5 llamadas el aparato dejó de sonar y yo respiré en paz… cerré los ojos y traté de revivir en detalle nuestra cita el día del carnaval.
Su rostro iluminado con una sonrisa.
Sus besos.
Su cálido cuerpo junto al mío.
Su entusiasmo cuando gané los premios para ella.
Me pregunté qué habría pasado con los peces de Bella… Bonnie y Clide… Charlie se acordaría de darles comida? Probablemente no…
De pronto escuché un escándalo a la distancia. Alice gritaba algo corriendo desde el bosque donde se encontraba cazando, pero hablaba tan rápido que no le pude (ni quise) entender.
Alice entró a la casa y se dirigió inmediatamente a mi cuarto, me destapó quitándome las cobijas y vibrando de emoción me dijo
-Emmett levántate! Es Bella… Bella está viva!
-Alice… no… no juegues conmigo –Le rogué cayendo de rodillas al suelo. Sería posible?
-Toma el teléfono Emm… ella quiere hablar contigo.
Yo estiré mi brazo temblando… podría ser una broma macabra? Tomé el teléfono y me lo llevé al oído.
-Aló? –Dije con voz ronca por la emoción.
-Emm! Osito! Estoy viva! –Exclamó la voz de mi Bella… un poco más musical, pero definitivamente la voz de mi Bella.
-Bella! –Exclamé y rompí a llorar.

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Okay! No pueden decir que no me redimí. Bella se salvó por sí misma de James antes de que éste pudiera violarla, y ahora la tenemos a la espera del rescate… la perdonará su osito? Ya veremos.

No olviden opinar!

1 comentario:

  1. Me encanto esa Bella auto suficiente!! Mientras Em lloraba amargamente ella se salvaba sola!!! Que bien!
    Ahhhh!! Ya espero el reencuentro...
    Que tengas linda semana!

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