El Crepúsculo de Emmett 18

Hola a todos! El esperado capítulo de El Juego finalmente está aquí… espero que lo disfruten como los capítulos anteriores… ;)

Varias de ustedes se enojaron conmigo por hacer que Emmett use condones, muchas quieren un Emmettcito, pero lamentablemente en esta historia eso no ocurrirá… sería muy parecido a Red Moon y no quiero repetirme. Además encuentro muy cómico imaginar a Emmett lidiando con la compra de preservativos… En fin… esta historia será "baby free".

Muchos cariños y gracias por seguir leyendo y comentando, aprecio cada una de sus palabras.

Abrazos de Emmett

R.

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Capítulo 18

Oh boy, I tell you so

Devil man coming for your soul

He's got a big shiny smile with teeth of gold

Teeth are meant for eating you

Devil Man / 100 Monkeys

Bella POV
Emmett y yo habíamos hecho el amor toda la tarde del día anterior y todo el día de hoy, y yo estaba temiendo seriamente sufrir lesiones por fricción, ya que estábamos sobre utilizando partes de mi cuerpo que nunca habían sido estrenadas.
Y es que Emmett era un amante incansable y su carácter lúdico lo hacían irresistible para mí. Cómo decirle que no cuando mi cuerpo pedía a gritos su toque?
Por eso a pesar de no ser una fanática del deporte, el juego de baseball era la oportunidad perfecta de compartir con Emmett (y su familia) en una actividad que no incluía lesiones por repetición o contorsión.
Me instalé en un rincón del claro en el que tendría lugar el partido y extendí una manta y preparé las cosas para comer un tardío almuerzo compuesto de sándwiches, croisants de chocolate (que todavía quedaban del día anterior) y café.
Me sorprendí bastante cuando Esme rehusó jugar para acompañarme en mi picnic. Más me lo habría esperado de Alice, que de seguro querría saber cómo habían ido las cosas con Emm… aunque con su habilidad de ver el futuro probablemente nos había visto cogiendo como conejos desde hace tiempo… me sonrojé ante esta idea.
-Todo bien Bella? –Preguntó Esme sentándose con una pasmosa gracilidad junto a mí.
-Sí Esme… Muchas gracias por… todo –Le dije sabiendo que ella sabía a qué me refería.
-Por nada querida, todos queremos que te sientas bienvenida en nuestra familia –Dijo Esme con una sonrisa tranquilizadora –Has devuelto la sonrisa a mi hijo, y nunca podré agradecerte lo suficiente.
-Lo amo Esme, él también me hace inmensamente feliz… -Le dije. Las dos nos quedamos unos minutos en silencio escuchando los primeros truenos de la tormenta.
-Ya van a comenzar! –Me dijo Esme –Fíjate bien en Emmett y Jasper, son unos tramposos –Me dijo al oído.
-Hey! –Se quejaron simultáneamente Jasper y Emm. Yo reí y mordí mi sándwich y bebí de mi termo.
Esme y yo vimos el partido unos 25 minutos comentando las jugadas hasta que a mí me dieron ganas de hacer pis. El café siempre tenía ese efecto inmediato en mí, maldición!
-Esme –Le dije –Voy y vuelvo, necesito hacer pis –Agregué en voz baja.
-Quieres que te acompañe? –Preguntó.
-No, gracias –Le dije sonrojándome –Voy detrás de los árboles y vuelvo en seguida…
-Está bien querida, anda –Me dijo. Yo tomé un puñado de servilletas de mi mochila y me alejé del claro en línea recta hacia el sur unos 200 metros. No quería que los vampiros escucharan a la humana haciendo sus necesidades, era humillante, pero realmente necesitaba ir! Había bebido demasiado café.
Cuando encontré un árbol lo suficientemente grande para esconderme de ojos curiosos me bajé los pantalones e hice pis… Aaaaaaah! Qué alivio… pero justo cuando me estaba subiendo los pantalones escuché a lo lejos un grito de Alice diciendo "Bella!" y en segundos los brazos de Emmett me rodearon y me cargaron hasta el claro.
-Estás bien? –Me preguntó Emmett frenético. Toda la familia se arremolinó a mi alrededor menos Alice, que estaba en trance en la mitad de la cancha de juego.
-Son nómades –Dijo Edward con voz plana, leyendo los pensamientos de Alice –Ya están aquí, no hay tiempo de correr –masculló.
La familia en pleno se puso en posición de ataque incluida Alice, que salió de su trance. Emmett me posicionó tras él y un rugido bajo escapó de su pecho, terrible y amenazador. Por primera vez Emmett me asustó, por primera vez me pareció una creatura peligrosa.
Pasaron largos momentos hasta que del lado este del claro aparecieron tres figuras caminando a velocidad humana. Eran, tal como los Cullen, excepcionalmente hermosos, dos hombres y una mujer, pero su ropa, a diferencia de la de los Cullen, era descuidada y sucia, y no llevaban zapatos. Caminaban con movimientos felinos, como si en cualquier momento se fueran a agachar y atacar, pero sus rostros se mantuvieron neutros, excepto por los ojos de la mujer, que se movían rápidamente de uno a otro de los integrantes de mi familia como evaluando su propia inferioridad numérica.
Sin decir palabra Carlisle, Edward y Jasper se adelantaron para saludar al grupo, mientras Emmett se quedaba atrás para proteger a las mujeres (particularmente a mí, que me escondía tras el enorme cuerpo de mi novio).
El hombre moreno que parecía ser el líder del grupo se adelantó y dijo
-Nos pareció escuchar un juego –Su acento era levemente francés –Mi nombre es Laurent, y estos son Victoria y James –Dijo señalando al hombre rubio y a la mujer pelirroja.
-Soy Carlisle. Esta es mi familia Edward, Jasper, Emmett, Esme, Alice, Rosalie y Bella –Dijo Carlisle sorprendiéndome al incluirme en las presentaciones pero sin llamar la atención sobre ninguno de nosotros.
-Tienen espacio para unos jugadores extra? –Preguntó Laurent tranquilamente.
-De hecho ya estábamos terminando. Pero ciertamente nos gustaría jugar con ustedes en otra ocasión –Dijo Carlisle –Pretenden quedarse en la zona mucho tiempo?
-No, nos dirigimos al norte. Simplemente estábamos curiosos en conocer el área y saber quiénes viven en los alrededores. No nos habíamos topado con compañía en bastante tiempo –Dijo Laurent conversacionalmente.
Yo apenas me atrevía a respirar, pero no podía evitar que mi corazón latiera indiscretamente con más fuerza del puro miedo que sentía ante esta tensa situación.
-No, esta región está vacía excepto por nosotros y el ocasional visitante tal como ustedes –Dijo Carlisle con toda calma. Tal vez Jasper estaba afectando el humor de los demás… aunque ciertamente no el mío.
-Ustedes viven aquí permanentemente? Cómo lo logran? –Preguntó Laurent luciendo interesado.
-Es una larga historia… por qué no vienen a casa con nosotros y conversamos confortablemente? –Dijo Carlisle amablemente.
Los tres intercambiaron miradas cuando la palabra "casa" salió a la palestra, y Laurent dijo
-Eso sería muy agradable… no hemos tenido ocasión de limpiarnos desde Ontario…
-Por favor no se ofendan, pero les agradeceríamos que se refrenaran de cazar en el área –Dijo Carlisle.
-No hay problema, cazamos en las afueras de Seattle –Dijo Laurent encogiéndose de hombros, y a mí me recorrió un escalofrío por la espalda ante las implicaciones.
-Les mostraremos el camino si quieren correr con nosotros. Emmett, Edward, Alice y Bella se llevan el jeep –Dijo Carlisle casualmente. En ese momento varias cosas pasaron a la vez… la brisa movió mi cabello en dirección a los nómades, y James cambió su postura para agacharse a una posición de ataque, Edward se puso rígido y Emmett asumió una posición de ataque rugiendo amenazadoramente.
-Qué es esto? –Preguntó Laurent mirándome interesado.
-Ella está con nosotros –Dijo Carlisle firmemente.
-Trajeron un snack? –Preguntó Laurent. Emmett volvió a gruñir, temblando de ira.
-Dije que ella está con nosotros –Dijo Carlisle con voz seca y cambiando su lenguaje corporal a una pose menos cordial.
-Pero… es humana! –Dijo Laurent sorprendido.
-Sí –Declaró Emmett.
-Vaya… parece que tenemos mucho que aprender de ustedes… aún así nos gustaría aceptar su invitación, y por supuesto no le haremos daño a su chica humana… como les dijimos, no cazaremos en su territorio –Dijo Laurent conciliador mientras James y Victoria intercambiaban miradas agraviadas.
-Perfecto –Dijo Carlisle –Rose, Esme, Jasper?
Emmett me tomó en sus brazos mientras Alice y Edward flanqueaban nuestra retirada. Corrimos hacia el jeep y Emmett le tiró las llaves a Edward.
-Tú conduces –Dijo subiéndose en el asiento trasero conmigo acurrucada en su regazo.
Alice se subió al jeep junto a Edward y éste comenzó a hablar casi demasiado rápido como para que yo lo entendiera
-James es un cazador… y su instinto de cacería se disparó cuando vio cómo reaccionaba Emmett y el resto de la familia para proteger a Bella. No hay nada que podamos hacer… la cacería comienza esta noche.
-Mierda! –Dijo Emmett y apretó levemente su agarre contra mi cuerpo. Mientras, Edward aceleró a casi 150 km por hora en el camino de tierra y yo pregunté adónde nos dirigíamos.
-Nos vamos Bella… lejos, donde el cazador no te pueda rastrear –Dijo Alice.
-No! Charlie! –Grité yo desesperada –Si no regreso a casa Charlie va a enviar a la policía a buscarme!
-Deberíamos haberlos matado a todos ahí mismo! –Rugió Emmett frustrado. Yo me acurruqué más en sus brazos y le dije
-Emm… Osito… déjame volver a casa… -Le pedí tratando de calmar la situación -Le voy a decir a Charlie que terminé contigo y que me regreso a Florida y entonces nos podemos ir donde tú quieras… pero no hagamos esto… no expongamos a tu familia a un escándalo…
-No! Hay que huir de inmediato, ustedes no escucharon la mente de James, el verdaderamente desea a Bella! –Dijo Edward vehementemente, sorprendiéndome. Nunca pensé importarle un rábano.
-Edward, Emmett, creo que Bella tiene razón –Dijo Alice –Si podemos hacer que Charlie crea que Bella se fue por su cuenta eso nos compra un par de días para poder cazar a James y a su clan.
-Emm… por favor –Imploré tomando su rostro entre mis manos. Sus ojos estaban completamente negros y temblaba de furia –Emm… volvamos a tu casa a buscar mi camioneta…
-Está bien –Dijo Emmett –Pero yo voy contigo! No me gusta perderme la pelea, pero no me podría perdonar el no estar a tu lado protegiéndote.
-Por supuesto! –Acordé de inmediato.
-Eso es perfecto Emmett, tú sabes que Jasper y el resto de nosotros nos podemos encargar del problema mientras tú pones a salvo a Bella… cierto Edward? –Preguntó Alice.
-Supongo que sí… -Dijo Edward dándonos una mirada por el espejo retrovisor. Emmett asintió en silencio y Edward dio una vuelta en U en plena carretera para dirigirnos a la mansión Cullen.
Al llegar a la mansión Alice y Edward se bajaron primero del jeep y nos flanquearon a Emmett y a mí. Emm insistía en llevarme en sus brazos, y su gruñido nuevamente comenzó a sacudir su pecho. Si no hubiera sido por las temibles circunstancias en las que nos encontrábamos lo habría encontrado sexi… pero tal como estaban las cosas, yo estaba aterrada y me aferré a Emm para calmarme un poco.
Entramos en la casa y apenas cruzamos el umbral Edward emitió de pronto un gruñido feral y se puso en posición de ataque.
-Tranquilo, hijo –Dijo Carlisle acercándose a Edward –Laurent está aquí para advertirnos… -Dijo mirando a Emmett y a Alice.
-James es el mejor rastreador que he visto en mis más de 300 años de vida, por eso me uní a su clan… -Dijo Laurent –Yo no sé por qué quiere a su mascota humana –Emmett gruñó amenazador –Pero lo que sí sé es que la protección que este clan está dispuesto a entregarle acaba de convertir este asunto en la cacería más divertida de la historia para él.
-Bella necesitas comer algo? –Preguntó Esme saliendo de la cocina.
-No gracias… estoy bien –Dije con un hilo de voz.
-Siéntate querida, luces pálida… Emmett! Pon a Bella en el suelo! –Dijo Esme.
-No! Nos vamos de inmediato –Dijo Emmett y en susurros muy rápido como para que yo los entendiera explicó nuestro plan a los demás.
-James no está en los alrededores –Dijo Edward –Mi telepatía tiene un alcance de un radio de 3 kilómetros, por lo tanto no puede haber escuchado esta conversación. Si quieren ir a casa de Bella este es el momento.
-Usen mi auto y manténgannos informados por teléfono de su ubicación –Nos dijo Carlisle –Esme y Rosalie, ustedes protegerán la casa de Charlie, corran hacia allá ahora.
Ambas asintieron sin decir palabra y corrieron hacia el exterior.
-Sí papá –Dijo Emm. Luego, rápidamente, nos despedimos de todos y me subí a mi camioneta. Emmett se subió al BMW de Carlisle y me siguió de cerca hasta llegar a mi casa sin contratiempos. Emm estacionó una cuadra pasada mi casa y estuvo a mi lado inmediatamente besándome con desesperación.
-Te amo Bells… lo siento… por todo… -Me dijo.
-Te amo yo también Emm… No te preocupes, Jasper va a matar a James y todo va a volver a la normalidad –Le dije sabiendo que las cosas difícilmente volverían a la normalidad para nosotros. Lo besé en los labios, las mejillas y los ojos y finalmente lo empujé.
-Te odio! Y no quiero volver a verte! -Le grité y entré a mi casa pegando un portazo.

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Próximo capítulo, la huida, estilo Emmett.

No olviden contarme qué les pareció!

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